Como la recuperada bitácora del capitán, estas páginas nos llevan por lugares, encuentros y desencuentros dentro de la historia de un viajero. Un recorrido cuasi cultural donde vamos de París a Ámsterdam, de Tel Aviv a Barcelona, de una historia a otra mientras el escritor cordobés Martín Cristal nos va haciendo parte de sus propias aventuras.

Cada letra del autor nos transporta a algún punto inesperado del mapa donde —a través de su prosa sencilla, sus tramas simples y un irónico humor— nos muestra parte de su vida, de sus romances, de sus historias y, como un personaje más de su propia vida, nos presenta el mundo a su manera.

Con una serie de cuentos cortos el cordobés logra que la juventud se identifique con los personajes. Tal vez porque deja de lado todos los prejuicios, para animarse a hablar de sexo, alcohol y drogas; o tal vez porque los relatos transcurren en el apogeo de su propia lozanía, es que logra esta magnifica química con adolescentes y no tan adolescentes.

Uno tras otro los romances, aventuras con amigos y una serie de delirios internacionales van surgiendo en los distintos puntos del mapa. En París con una colorada, en Ámsterdam con dos amigos, en Tel Aviv una cita inconclusa, en Barcelona una historia de traición y un romance de fondo. Así es como en cada una de las ciudades donde estos cuentos están ambientados se desarrolla un mundo diferente, y mientras uno se hace protagonista de las historias se traslada a cada lugar, a cada momento, logrando así encontrarse en cada personaje.

Un libro ágil, para pasar un buen rato en estas larguísimas —gracias a Cristina— tardes de verano. Excelente propuesta para reír, suspirar y maldecir en voz baja, mientras tu mente vaga y divaga por los diversos caminos del mundo. ♦